Tengo la sensación que como conmigo mismo. Conmigo, pero envejecido. Resulta un poco extraño. Me veo como un maestro de Kung-fú que me mira entornando los ojos, como diciendo: «Andreu, andreu. Que nos hacemos mayores chato!!!».
Quiero aclarar que solo bebo un vaso de vino y que la comida está en buen estado.
A veces
Jueves, 6 de marzo de 2008