Significa que ya sabes un 75% por ciento de lo que te va a decir. Porque los políticos -en su estado permanente de campaña electoral-, trabajan por no salir del «personaje» que protagonizan. El «personaje» de un hombre que lanza titulares, doctrina de partido, crítica del adversario y promesas varias. Eso ya lo sabía, pero lo he confirmado en propias carnes. Mariano Rajoy, en su entrevista para nuestro programa, respondió perfectamente al perfil predeterminado. Hay que decir que en el PP, nos trataron con educación y profesionalidad. Que nos dejaron montar nuestro «circo» como quisimos y que el propio Rajoy debutó como actor en los primeros minutos del vídeo. Traté de mantener una posición equidistante, lanzar mis chistes y escuchar las tesis del líder de la oposición.
Me tengo que guardar mis ideas personales, porque para eso son personales. Me tuve que poner el «mono» de trabajo y preguntar. Y dejar que el entrevistado diga lo que le dé la gana, porque yo no soy analista. Yo soy payaso, que se parece pero es algo diferente. Tengo mi quiniela personal para los próximos comicios. Y me gusta que sea así: íntima. Mientras tanto, seguiré riéndome de todos y con todos.