Aclaración

Sábado, 19 de julio de 2008

Me veo en la obligación de compartir un increíble acontecimiento cotidiano que me acompaña cada día, durante las dos últimas semanas. Voy por la calle tranquilamente o entro en un bar o salgo de una tienda. Algún desconocido me saluda como si hubiera hecho la mili conmigo (esto no es nuevo) y automáticamente suelta: «¿Pero tú no estás de vacaciones?». Con un tono como de reprobación. Yo contesto: «Sí.» Fin del acontecimiento cotidiano.

Si fuera uno, dices «bueno, un quisquilloso». Pero cuando todo el mundo lo dice, me pregunto dónde habré fallado en la comunicación de que ESTOY DE VACACIONES. Igual sería bueno aclarar que cuando estás de vacaciones, puedes seguir respirando y haciendo cosas normales. Parecerá obvio, pero tendrían que ir a mi lado y comprobar que la obviedad es una de las mejores herramientas para romper el hielo con un desconocido.

De vacaciones