Balduino es el gato de Frankie. Viven juntos. El otro día estaba en su casa, fui al lavabo y rápidamente me siguió Balduino como una exhalación. Pegó un salto y se plantó en el lavamanos. No supe qué hacer e informé a su dueño: «que el gato ha saltado». «Ábrele el grifo». No daba crédito, pero hice lo que me dijeron. Y sí, sí. El gato bebió como un campeón. Solo hace falta que sepa cerrarlo y ya de paso que prepare la cena, conteste al teléfono y te aparque el coche. Conociendo a Frankie, tiempo al tiempo.
El gato que bebe del grifo
Jueves, 3 de abril de 2008