Ha empezado la cuenta atrás hasta el estreno del nuevo programa en Antena 3 y mucha gente me desea suerte. Gracias. Gracias pero ya no hace falta porque el otro día abrí una galleta china de la suerte y me salió este mensaje: «many successes will acompany you this year». Por lo que parece, hay un «ente» superior que se manifiesta a través de papelitos que van dentro de galletas y ese «ente» ya ha dictado su dulce sentencia. Esto va a ser un camino de rosas. Y, así, ¡todo el año!
Habrá que trabajar mucho, como siempre, pero antes de cada reto me encerraré en el camerino y me repetiré a mi mismo: «la galleta no puede mentir, la galleta no puede mentir». Llevaré siempre el papelito encima. Entonces recuperaré la serenidad y el control, todo fluirá, todo será luz y armonía…
Hay que ver lo que puede conseguir una simple galleta (que no llegué a comerme porque no tenía gusto de nada). A ver si es que el éxito es eso: algo insípido. Vale, no le doy más vueltas.