A ver si es que voy a estar obsesionado, pero el otro día en el aeropuerto de Barajas, se me apareció ésta cara en el escaparate de una librería. No me digan que no es clavado a Robert de Niro. No puedo aguantarle la mirada. Pruébenlo. Parece que ve en tú interior. Nada. Hice una foto y me comporté como si nada.
Otra vez de Niro
Lunes, 14 de enero de 2008