Escribo esto mientras el taxi pasa por delante del Bernabéu. Ya ha empezado el baile. Se levantó el telón. La suerte (?) quiso que el nuevo President Puigdemont y un servidor guardemos un parecido más que razonable. De ahí a la peluca había un paso. Y lo dimos. El primero de los muchos que vamos a dar. Siempre al borde del precipicio, que es donde vive la comedia. Me siento feliz. Contento, motivado, apoyado. Todo lo necesario para volar cada noche con mi equipo. ¡¡¡Que no pare la música!!!
Empieza el baile
Miércoles, 13 de enero de 2016