Fue una de esas noches en las que te vuelves a enamorar de la televisión. En la que el soplo de la genialidad sobrevoló el plató y el tiempo se congeló. Enrique Morente (solo, en una mesa marcándose el compás), cantó un tema de su disco dedicado a Picasso. Vino porque le dio la gana, que necesidad no tiene. Fue como ver a un genio, dentro de otro genio. Y pensé que todavía no está todo perdido en el mundo catódico. Es una cuestión de ponerle ganas. Gracias maestro.
Genio al cuadrado
Noticias de Furaco
El presidente de Cantabria y colaborador del programa, Miguel Angel Revilla, me manda información sobre Furaco (El diario montañés) y sus intentos amatorios con las osas asturianas.
Hablamos del tema en su última visita. La época de apareamiento se acaba el 15 de junio y el semental cántabro «trabaja» bajo presión. «Si es que ellas, son como de peluche», puntualizó el presidente. Veremos. El tema es de vital importancia.
La capacidad fecundatoria de toda una comunidad está en entredicho. Aunque el representante sea un oso. O precisamente por eso. Seguiremos informando.
Cantar y reir y cantar
Berto está en Belgrado pero antes de marcharse, la semana pasada, se marcó una canción llamada «Te quiero normal». Un servidor suele canturrear con la ayuda y la paciencia de Joan Eloi. Reconozco que es uno de los momentos más excitantes del programa. Improvisación pura (hasta diría que cruda), que se cocina a la vista con mejor o peor fortuna, pero con risa. Es como tirarse a una piscina, sin saber si habrá agua.
Somos «cantarines». Es un hecho. Pero creo que vale la pena intentarlo y, pese a ser los últimos minutos, demostrar que para nosotros «hasta el rabo todo es toro». Lo bueno de este programa es que la sorpresa puede saltar hasta en los títulos de crédito. En la foto se aprecia la intensidad creativa que se vive a veces, en la sala de ensayo exterior. ¡Única en Europa!
Lo mejor que le puede pasar a un cruasán
Es que te lo regale un buen seguidor del programa, que sea de chocolate (el cruasán) y que encima esté cargado de cariño y de fidelidad. Ahí me has roto macho.
El ejemplar gigante que sujeto con mi mano derecha, es obra de Andreu de «La Granja» de Argentona. Se percató que me pierden los cruasanes de chocolate y decidió hacer uno king size sólo para mí. ¿Por qué? Porque sí. Porque le dio la gana, ya que nos ha seguido desde siempre.
Estos gestos lo son todo para mí. Lo explican todo. Nosotros, sin la gente, solo somos graciosos. Con espectadores como Andreu, somos unos afortunados. (Lo de la dieta ya lo he pillado. No queréis que la haga ¿no? Vale, de acuerdo). Gràcies Andreu.
Honor total
Lo de Siniestro es de otra galaxia. La galaxia gallega, concretamente. Llevan veinticinco años dando guerra, con el cachondeo de los descreídos, la sangre contaminada por el punk y la incorrección y esa mirada «enmarcada» en las gafotas de un Julián Hernández, cargada de lucidez. Me encantan. Por eso fue una sorpresa, (de las buenas) enterarme de que se declaraban fans de Chiki-Chiki. Con esa excusa los invitamos al programa y fue un placer pasar la tarde con ellos.
A las mentes preclaras que sostienen que no apoyamos la música, les dedico esta foto con siniestro que tienen nuevo trabajo. Se llama «Que parezca un accidente» e incluye un DVD.
Menos hablar y más ver la sexta.