Diario La Razón. 5 de julio de 2012. De éste siglo…
La sinrazón
El roto
Sensacional «El roto». Como siempre.
El demonio noruego
La mirada de psicópata del asesino noruego encierra todo el mal posible. Una tormenta de odio irracional que nos ha dejado helados. Dice que estamos en guerra y por eso tuvo que matar. La única que está en guerra es su cabeza, sus ideas xenófobas extremas, su sangre fría, su maldita posteridad. El infierno es algo agradable para él. Hay que pensar algo peor.
Mi manifiesto
No hay nada mejor que tomar distancia de las cosas, para darle el valor y la importancia que tienen. No estoy cabreado, ni siento amenazada o coartada mi libertad. ¡Faltaría más! Estos días de vacaciones me han servido para pensar un poco (muy recomendable) y voy a internar resumirlo. Esto no tiene más pretensión que dejar claro lo que pienso y agradecer todas las muestras de apoyo. Seguiré haciendo lo que sé hacer, para la gente que quiera seguirlo y con más ilusión que nunca.
—Las redes sociales son importantes pero no son el centro del universo. Son una herramienta más de la revolución tecnológica.
—Tenemos mucha tecnología a nuestro alcance pero se nos ha acabado la paciencia, las ganas de escuchar, debatir y enriquecernos. Nos vale con el ruido, el nuevo opio para estos tiempos encabronados.
—El ruido no cambia las cosas. La acción, sí.
—»Seguir» a alguien en una red social no debe ser sinónimo de acoso o coacción. La libertad de expresión está por encima de todo y de todos.
—El anonimato es la máscara de los cobardes. El insulto, su única manera fácil de expresarse.
—Los que me atacan no me conocen, ni yo los quiero conocer.
—¿Para qué y cómo usaremos tanta tecnología?
—Podremos ser una sociedad interconectada y justa, que reclama información libre a la vez que da voz y oportunidades, o una red de ociosos burgueses quejicas e intolerantes. De nosotros, depende.
—Haríamos bien en invertir toda esa rabia que circula por internet, en salir a la calle, movilizarnos, decirles a los culpables de la crisis que no tragamos.
—Hay que mover más el culo y menos el ratón del ordenador. ¿Hacen falta más ejemplos de revoluciones, de gritos populares por una sociedad más equilibrada?
—Hay más gente buena que mala. Siempre ha sido así y siempre lo será. Yo trabajo para los buenos.
—Los periodistas (o lo que queda de ellos) están embobados con las redes. Utilizan las «entradas» como noticias (la mayoría de veces es mera cotidianidad) y no se molestan en confirmar o documentar. Una prueba más de la decadencia errática de la profesión.
—La nueva censura son los intereses empresariales de las empresas de comunicación.
—Búscate las fuentes de información. Aplica tu sentido común, selecciona y acércate a la verdad.
—Y, por último, recuerda: mucho mejor un buen arroz con los amigos de verdad que dos horas en internet.
Andreu Buenafuente
2011
Guardiola
A estas alturas de la liga, mucho tendrían que cambiar las cosas para que el Barça no se lleve el título. Otra cosa será la saturación del mes de abril, con tanta competición en juego. Pero hoy quiero hablar de Guardiola.
La RAI ha emitido una entrevista en la que el entrenador -que teóricamente solo hablaba del Brescia- explica que se acaba su etapa en el Barça y otras opiniones. Rápidamente corrió la palabra «traición», porque según parece el Barça pactó que no se emitiría lo referente al Club. Vamos a ver. Hay que ser bastante ingenuo para pensar que un medio de comunicación se va a guardar la ÚNICA entrevista que ha dado por separado Pep.
Esto es algo que tenía que pasar y, lo que más me cabrea, es que reforzará la postura de Pep al respecto. Postura con la que nunca he estado de acuerdo. Le admiro y respeto, pero no puedo entender como un entrenador del Barça (con todo lo que ello supone), no da el más mínimo gesto de abrir un poco su pensamiento, sus ideas, su visión de la vida, más allá de las previsibles y frías ruedas de prensa. Sí, sí, ya se que él ha echado cuentas respecto a sus comparecencias y que se empieza y no se acaba, y que para contentar a todos, mejor no dar ninguna y todo eso. Repito: no estoy de acuerdo. Tu eres libre de planificar, seleccionar y discriminar los medios a través de los cuales quieres dirigirte a esa legión de seguidores, unidos por un sentimiento, por unos colores y por un equipo. Él es el alma del equipo. Y el alma no habla, no conecta con los aficionados ávidos de un poco más de humanidad. Aficionados tan buenos, que hasta han normalizado ésto.
Pep solo ha hablado con italianos tramposos, por los que habrá que pagar el pato. Solo faltará escuchar un «ya os decíamos que no era bueno dar entrevistas». Esto solo genera recelos, confusión y malos entendidos. ¿Se quiere ir Pep de verdad? No lo sabemos y, lo que es peor, quizás nunca lo sepamos hasta que se vaya. Como profesional del mundo de la comunicación y, desde el respeto, no puedo aprobar que uno de los iconos más sanos e interesantes de los últimos años, nos tenga sumidos en el silencio.