¿Cómo se va a arreglar la crisis de los peajes en Cataluña? Poniendo más peajes por toda España. Curioso método liberal de patada y para delante. El cabreo catalán de las autopistas está más que justificado. Se ha ido soportando en silencio durante décadas y ahora ha explotado. Normal. Cataluña tiene uno de cada cinco kilómetros de autopistas de todo el país.
Recuerdo cuando yo era pequeño, en los setenta. Nos dijeron que no había recursos y que había que financiarla a través de una concesionaria que la explotaría durante 25 años. Nos lo creímos, estábamos construyendo la modernidad. Pero el tiempo ha pasado, la concesionaria se forra y el Gobierno ahora es más dependiente que nunca de los impuestos del maldito negocio de las barreritas. Un Gobierno (el catalán) sibilino y escurridizo ante el marrón que dice: «Entendemos el malestar». Puede que lo entienda, pero ahora veremos cómo soluciona el conflicto.
Josep Casadellà fue el conductor que encendió la mecha con su negativa a seguir pagando por conducir. Pero el polvorín del hartazgo hace muchos años que ha ido creciendo. La crisis solo ha destapado y recrudecido lo que vergonzosamente se ha venido arrastrando. Me sumo al #noquieropagar o propongo una revisión del eslogan: #noquieropagarportodo.
«El Berenjenal» en Interviú.