Una pared desconchada me sugirió, inmediatamente, una posible cara: un señor de mediana edad, calvo, absorto y con un cráneo, digamos que diferente.

Una pared desconchada me sugirió, inmediatamente, una posible cara: un señor de mediana edad, calvo, absorto y con un cráneo, digamos que diferente.
Un poquito de calma para empezar la semana.
Foto intervenida, 2024.
Cinco horas de coche para «cargar pilas». Viajar a Donosti para visitar a Karlos Arguiñano y comprobar, una vez más, la vitalidad de este referente. Comer, charlar y volver con un cartón de huevos, un libro de recetas y muchas ganas de seguir disfrutando de lo que mejor sabemos hacer.
Gracias amigo.
Barcelona, 2024.