Ayer debuté como ilustrador en el New York Times. ¡A lo grande! Gracias al apoyo de Mikel Urmeneta y de su/mi amigo Guillermo Nagore, entré en contacto con el diario más importante del mundo, hace un año. Cogí un taxi y dije: «¡Al New York Times!». Guapo, ¿no?. El taxista rompió la magia y me pidió la dirección exacta. Me recibieron, me dedicaron unos minutos y les enseñé mi trabajo. No me conocían de nada. !Bien! Luego, Guillermo me anunció que igual me pedía algo. También me preguntó: «¿Por qué lo haces?», mientras tomábamos un café en un edifició que daba vueltas, cerca de Times Square. «Es muy fácil. Me divierte».
Entregué mi trabajo la semana pasada en plena vorágine de BFN. Cuándo llegaba a casa tras el programa, en New York eran las cinco de la tarde. Primero unas muestras, luego unas propuestas y el definitivo (tras su aprobación), con sus retoques. Como diría Manquiña en Airbag : «¡Que profesionales!». El dibujito, se ha publicado en la página de las cartas de los lectores, a partir de una crónica que alertaba sobre el aumento de los suicidios en la gente de mediana edad. El tema no es la alegría de la huerta, lo sé. Lo más importante es que mi pasión por los dibujitos ha recibido un buen apoyo y lo quería compartir con vosotros.
New York Times
Lunes, 25 de febrero de 2008