¿Eres libre?

Miércoles, 31 de julio de 2013

Me disponía a usar una escalera mecánica situado en un barrio torturado por cuestas empinadas e infinitas. Un barrio que pensó alguien que, evidentemente, nunca vivió allí. Resoplando, agradecí al artilugio. Pero al mirar hacia abajo para pisar con seguridad, una pregunta pintada me disparó sin avisar. ¿Eres libre? El que pregunta si eres libre, ya sabe que no lo eres. Él tampoco lo es, ¿quién lo es realmente? Todos presumimos de libertad, pero cientos de hilos invisibles nos atan a nuestra propia vida. Los mismos hilos que nos apuntalan y nos permiten vivir. Sin ataduras serías un globo de helio. Muy bonito, sí, pero acabarías explotando en la estratosfera. Y allí estaba yo. Pensando todo esto mientras la escalera avanzaba como una cremallera sobre una calle cosida a escaleras. Si fuera libre de verdad, jamás pasaría por esa calle.

«Fotodiario» en El Periódico

¿Eres libre?

El (otro) pesimismo

Martes, 16 de julio de 2013

Hay «otro» pesimismo. Uno que no responde al patrón de gente oscura, agorera y siempre negativa. Los pesimistas están muy mal vistos, y mucho más ahora que florecen los gurús de debajo de las piedras, como hechiceros de una tribu triste y sin horizontes, que vendríamos a ser todos nosotros. Los otros pesimistas de los que hablo son gente a la que le asiste la razón, un cierto estudio sincero y sin tabués de las cosas (gente informada, con criterio) y, en consecuencia, con un pronóstico nada amable de lo que nos queda por delante.

Digo esto porque he coincidido con algunos últimamente y me han dejado tocado. Son personas vitales que quieren con todas sus fuerzas que todo vaya bien, pero… Un hombre mayor, ilustrado y simpático, me dijo una tarde con un helado en la mano: «El capitalismo ha fracasado como lo hizo el comunismo en su momento. Al comunismo se le dejó caer, pero con el capitalismo no va a pasar. Hay demasiados intereses como para que eso suceda. Ya verás, ya…». Tuve que lamerme la mano, porque el chocolate (amargo) chorreaba por ella. Otro. Un amigo rockero de profesión. Músico, soñador pero currante. Huyó de la Argentina oscura de Videla y construyó su vida en España. «Todo es una gran farsa. El sistema se está purgando para proteger y reforzar a las clases dominantes. Un día hablarán de recuperación, pero no será verdad, lo que tendremos será una enorme brecha entre los que más tienen y los más pobres. Habrán ganado. Otra vez». Nos despedimos. Mientras volvía a casa recordé a Sampedro cuando decía: «Los poderes económicos están fuera de todo control político». Me miré en el espejo. «¿Qué significa, a día de hoy, ser optimista?». No me contesté.

«El Berenjenal» en Interviú.

Ver más